La cultura de barra en este país es, probablemente, un bien inmaterial en el que contamos con muchos años de experiencia y arraigo. Sentarse en una barra y charlar, mientras se disfruta de una bebida, cualquiera que sea, es una forma más de socializar, y así se ha ido dibujando también desde hace tiempo en los bares y barras de Mallorca.
En esta categoría se repartieron cinco premios de distinta índole, pero todos muy apegados a esta cultura de bar y barra.
El quinto de los títulos aquí reflejados es el correspondiente al Premi Millor Cocteleria ganado por Rafael Martín de Brassclub, un local que este año ha cumplido diez años y que, por tanto, este reconocimiento es un reflejo del buen hacer de esta década. En palabras de Martín, «supone el reconocimiento a todo el trabajo, sufrimiento y esfuerzo, tanto mío como el de todo mi equipo y familia, así como a todos los clientes que nos visitan cada día, que son los que nos hacen que sigamos luchando. Con nuestro trabajo, también demostramos que en Mallorca tenemos un producto muy bueno, así como productores y trabajadores, y esto se tiene que seguir mostrando. Premios así engrandecen nuestra Isla». Rafael Martín asegura que, para él, un cóctel es una experiencia que se vive desde que se entra en el bar hasta que uno se va de él, en todos los sentidos. «La música, el ambiente, el staff, que esté rico y compensado,… Pero, sobre todo, saber adaptar el cóctel a la persona que lo va a beber, ese es el secreto», asegura el experto.